lunes, 4 de julio de 2011

del papiro a las páginas de internet

    DEL PAPIRO A LOS BLOGGERS

    Si no se hubiera inventado la escritura, sería imposible que nuestros ancestros hubieran podido legarnos  sus conocimientos, no tendríamos información acerca de su forma de vida ni de sus pensamientos, ni de sus logros o sus costumbres.
    Uno de los hechos más trascendentales de la evolución de la humanidad es la invención de la escritura ya que hace posible la transmisión a distancia, tanto en el tiempo como en el espacio, de todo tipo de información y permite eternizar conocimientos, pensamientos e ideas.
   Casi en el inicio de nuestra especie, los primitivos seres humanos que habitan la tierra,   realizan  dibujos sobre piedras o cortezas de árboles como una forma de arte y comunicación, pero tienen que pasar miles de generaciones para que se invente una forma más adecuada de registrar  ideas o información.
   La escritura, ese hito trascendental que permite separar la prehistoria de la historia,  aparece en su forma primitiva unos cinco mil años antes de Cristo en la Mesopotamia Asiática, Egipto y China, primero bajo la forma de pictogramas sencillos, luego como un sistema ideográfico, cuando se emplean varios de ellos para representar ideas o verbos, como por ejemplo: la escritura cuneiforme de los sumerios, los jeroglíficos de los egipcios o los pictogramas mayas.
  Lentamente la escritura pictográfica e ideográfica evoluciona y se inventan signos que representan los sonidos de las palabras. El invento de los signos fonéticos más indispensables para representar todas las palabras es un progreso muy importante ya que facilita la escritura. El alfabeto es una creación fenicia del primer milenio antes de Cristo. Este pueblo con su comercio marítimo muy desarrollado lo difunde por el Mediterráneo, siendo adoptado y modificado luego por los griegos y empleado por los romanos en su escritura en latín, idioma  básico para todas las lenguas europeas occidentales.
     La escritura no solo nos permite la expresión y la comunicación sino que  facilita  el acceso a la cultura de todas las clases sociales y asegura la difusión de las ideas y de la información. En sus comienzos,  en las civilizaciones primitivas, son pocas las personas que saben escribir, las que practican ese arte sobre piedras,  pergaminos de cuero o papiros, reseñando los acontecimientos y sucesos diarios se llaman escribas  y podemos afirmar que son los primeros periodistas de la historia.
     Más tarde, ya en el imperio romano, aparecen gazetillas semejantes a diarios que publican noticias sobre sucesos, hechos de sociedad y comentarios de carácter oficial. En el 59 a C con el gobierno de Julio Cesar se crea un boletín informativo que difunde los acontecimientos de su gobierno y del senado romano incluyendo también información de carácter social.
   Si bien antes del Renacimiento prevalece la tradición oral, en distintos pueblos y en distintas culturas aparecen medios de comunicación escritos de vida efímera o poco duradera.  La invención de la imprenta alrededor de 1436 permite la aparición de distintos periódicos en Europa cuyo origen está relacionado con hechos puntuales para difundir  noticias específicas consideradas importantes. El primer de ellos aparece en Venecia en 1556 bajo el nombre de “Notizie Scritte”, la sucripción se realiza con una moneda que se llama “gazetta” lo que da origen a la palabra gaceta.
    Ya en nuestro territorio, el 1º de abril de 1801, nace a instancias de Manuel Belgrano, el primer periódico editado en Buenos Aires, “el Telégrafo Mercantil” de vida breve, clausurado por las autoridades virreinales un año después,  por su contenido político y el intento de difusión de las nuevas ideas económicas, sociales y políticas.
   Junto con la patria, el 7 de junio de 1810, nace “la Gazeta de Buenos Aires” fundado por Mariano Moreno con el objetivo de “anunciar al público los actos oficiales y las noticias exteriores y locales”, son redactores del primer periódico independentista, prestigiosos de la talla de su fundador, Manuel Belgrano y Juan José Castelli.
    Durante el siglo XIX comienzan a publicarse obras periódicas ilustradas, las primeras revistas, generalmente semanales, donde además de las noticias aparecen notas sociales, artículos periodísticos más extensos, folletines, etc. Con el nacimiento de la fotografía esas publicaciones las incluyen profusamente, reemplazando los dibujos y los cuadros que las precedieron.
    Los vaivenes políticos de la época,  la llegada de una gran masa de inmigrantes europeos y la formación de nuevos partidos políticos en el país, permite la creación de nuevas publicaciones con distintos formatos y disímil perfil editorial.
    El 8 de octubre de 1898 nace la revista señera en nuestro país y en Hispanoamérica: Caras y Caretas. Los responsables de ella son el ex presidente Bartolomé Mitre, el periodista conocido como Fray Mocho cuyo verdadero nombre es José Sixto Alvarez y tres inmigrantes españoles: Manuel Mayol, José Maria Cao y Eustaquio Pellicer. Caras y Caretas, ampliamente ilustrada, marca un hito importantísimo en la historia periodística de nuestro país y de las revistas en la Argentina. Con un contenido ecléctico y variado, atractivas ilustraciones y fotografías, artículos periodísticos de calidad y un precio muy accesible, su venta masiva la transformó en un éxito siendo exportada a otros países americanos. En los números de la revista se retratan cuatro décadas de la historia política argentina; sus artículos y notas son un reflejo de la cultura del país. La  revista acompaña la gran metamorfosis de Buenos Aires durante 41 años, refleja la incorporación de los inmigrantes a la sociedad argentina, los cambios políticos, el desarrollo del comercio, el nacimiento de un movimiento popular que se transforma luego en el peronismo, las costumbres, las características sociales, las tradiciones, la moda.
    Otras revistas argentinas que se destacan en distintos momentos hacen historia en el periodismo como el Mosquito, Rico Tipo, Satiricón, La Semana, etc. Los avances tecnológicos acompañan su creación, difusión y desarrollo  reflejándose en ellas, facilitando de diversos modos el acceso a mayor cantidad de lectores. En la actualidad, Internet ha permitido la creación de las revistas digitales con particularidades propias que permiten la llegada a millares de lectores.
       A principios de la década de 1960, en plena guerra fría, los Estados Unidos crea a instancias de J.C. Licklider, director de la oficina de Técnicas de Proceso de la Información del Pentágono, una red de computadoras interconectadas con el objeto de compartir la información que se guarda en ellas, con fines estrictamente militares. Son solo cuatro computadoras ubicadas en distintos lugares del país del norte que se transforman en cuarenta ordenadores en solo dos años. Los objetivos militares de esa primera red se circunscriben a un grupo de computadoras pero las redes que comienzan a proliferar, permiten incorporar usuarios con propósitos científicos y académicos, comienza a gestarse Internet.
    Internet es una red que conecta no solo computadoras entre si, sino redes de computadoras, con el objeto de intercambiar información, su nombre surge de la expresión en inglés “redes interconectadas”: interconected networks.  En 1990 el físico Tim Berners Lee (inglés) y el ingeniero en computación Robert Cailliau  (belga), conciben la idea de compartir la información contenida en los sistemas informáticos y diseminarla,  un hipertexto global, creando la base del world Wide web. El desarrollo de la red es imparable y en poco tiempo permite interconectar a usuarios de todo el mundo. En la actualidad Internet es una realidad firmemente establecida y poco a poco se incorporan a ella miles de personas siendo el medio de comunicación con crecimiento más rápido en toda la historia.  Revoluciona el mundo de los medios de comunicación ya que hace posible la llegada de la información a una cantidad inimaginable de lectores de los más variados perfiles, permitiendo la interacción con los destinatarios y una ágil difusión de la información.
   Empleando este revolucionario medio de comunicación, te presento esta páginar esperando contarte entre mis asiduos lectores.

 


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